img
Noticias 2017-09-13 07:03

El INBA rindió homenaje póstumo al arquitecto Carlos Ortega Viramontes

El INBA rindió homenaje póstumo al arquitecto Carlos Ortega Viramontes


· En una reunión de amigos y familiares se recordó su vida y obra



· Fue al mismo tiempo un hombre y un ser humano: Vargas Salguero





Si hay alguien que haya practicado la arquitectura de manera serena y callada, que haya aportado su talento y oficio a nuestro país, ese hombre fue el arquitecto Carlos Ortega Viramontes. Así se expresó Dolores Martínez Orralde, directora de Arquitectura y Conservación del Patrimonio Artístico Inmueble del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), durante la mesa de reflexión Arquitectura in memoriam. Carlos Ortega Viramontes, efectuada en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes.



Ortega Viramontes –quien falleció a los 90 años el pasado 13 de junio– fue uno de los arquitectos que ayudaron a construir el paisaje urbano del México contemporáneo, como la famosa Villa Olímpica en la Ciudad de México, hospitales y estaciones de ferrocarril en todo el país; con su obra dejó un ejemplo de estilo y época dentro de la arquitectura nacional. Además fue un destacado catedrático que formó diversas generaciones de profesionales.


En este homenaje póstumo participaron Ulises Ortega Chávez y Estefanía Chávez Barragán, hijo y esposa del arquitecto homenajeado, así como sus colegas y socios Ramón Vargas Salguero y Félix Sánchez Aguilar, con la moderación de Dolores Martínez Orralde.



“Si hubiera que utilizar una palabra para sintetizar la vida y obra del arquitecto Ortega Viramontes, sería esencia”, aseguró el también arquitecto Ulises Ortega Chávez, quien recordó a su padre como amigo, compañero, socio y creador de imágenes.



“Del arquitecto aprendí que generar valor por un sueño es más importante que generar valor en la riqueza”, complementó. Para él, su padre fue un hombre humilde y responsable en todos los aspectos de su vida, pero con un gran sentido del humor. “Si la gente lo quiere, no es por lo que tenía sino por la forma en que lo hizo”, expresó.



Por su parte, la doctora Estefanía Chávez Barragán, también destacada arquitecta mexicana, contó que conoció a su esposo en 1954 siendo ambos estudiantes de la Escuela de Arquitectura de la Universidad Nacional Autónoma de México. Trabajaron juntos en sus primeros proyectos y llevaron una vida de trabajo y armonía junto a su familia.



“Él sabía que celebraríamos su 90 aniversario en el Palacio de Bellas Artes, sin embargo se adelantó en el camino”, expresó la arquitecta, quien agradeció al INBA por cumplir la celebración a manera de homenaje póstumo.



Mientras tanto, el arquitecto Ramón Vargas Salguero recordó a Ortega Viramontes desde el lado de la academia y el compromiso social. Por ello, contó tres anécdotas de vida, una de las cuales relató que el propio Salguero fue a dar a la cárcel por sus ideas socialistas en la época de represión de los años sesenta.





Ortega Viramontes fue uno de los pocos en visitarlo en prisión y hasta ahí le llevó ayuda al calificarlo como uno de los mejores arquitectos en ese momento. “Carlos era de aquellos personajes que bien cumplen la difícil sentencia de ser al mismo tiempo un hombre y un ser humano”, dijo emocionado Vargas Salguero.



El arquitecto Félix Santander recordó a Ortega Viramontes como un compañero de aventuras, como socio y colega, como profesional y docente, pero sobre todo como amigo. Expresó que el homenajeado, desde que nació, estaba destinado a ser arquitecto, que siempre se preocupó no por construir edificios sino para que la gente que los ocupara realmente los disfrutara.



En ese sentido, comentó, Ortega siempre quiso que la gente tuviera lo que él tenía, por lo que fue un hombre sencillo y bondadoso para con su familia y sus amigos, entre quienes se encuentra el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas, mismo que asistió al homenaje.



“El legado de Ortega Viramontes está entre el afecto y la arquitectura, entre la amistad y los pasillos de la Facultad de Arquitectura, pasando por la Academia de Arquitectura y el Colegio de Arquitectos.



“La mejor manera de recordarlo es mantener vivo su legado, un compromiso que refrenda el INBA e invita a sus amigos y colegas a realizarlo, cada uno desde sus trincheras”, dijo la titular Dolores Orralde al saludar a Cuauhtémoc Cárdenas.

Mas Articulos