img
Noticias 2017-12-29 14:57

Sensibles decesos en el INAH en 2017



Sensibles decesos en el INAH en 2017



*** Entre los expertos de la institución que fallecieron se encuentra Ángel García Cook, reconocido por su labor en la región de Tehuacán-Cuicatlán y en Cantona



*** También Luis Joaquín Leira Guillermo, especialista en el estudio del periodo Posclásico Tardío (1250-1550 d.C.) en la Costa Oriental de Quintana Roo



Connotados investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y otros ligados a éste en los ámbitos arqueológico, antropológico e histórico, murieron en 2017, dejando irreparables pérdidas pero cuyo legado continuará en beneficio de las presentes y futuras generaciones.



Una de las ausencias más profundas que dejó este año fue el deceso del arqueólogo Ángel García Cook, la madrugada del domingo 29 de enero a la edad de 79 años. El investigador emérito INAH es reconocido por su labor en la región de Tehuacán-Cuicatlán, desarrollada desde 1961, así como en la Zona Arqueológica de Cantona, Puebla.



Distinguido por su sencillez, disciplina y capacidad de organización, siempre se manifestó orgulloso de haber encontrado los olotes más antiguos del mundo en las cuevas de Coxcatlán, San Marcos y Purrón, durante sus primeras investigaciones de campo al lado del maestro Richard S. MacNeish.



A Cook se le recuerda como un arqueólogo integral, ya que siempre se mostró responsable de divulgar aquello que exploraba, así lo plasmó en sus más de 200 títulos, entre libros y artículos.



Dieciocho días después de aquel suceso, a los 60 años de edad, falleció el arqueólogo Luis Joaquín Leira Guillermo, estudioso del periodo Posclásico Tardío (1250-1550 d.C.) en la Costa Oriental quintanarroense.



El especialista nació en La Habana, Cuba, en abril de 1956, ahí pasó sus primeros años de vida escolar, tiempo después, junto con su madre y hermana, se trasladó a la ciudad de Mérida donde comenzó su carrera en antropología, con especialidad en arqueología, en la Universidad de Yucatán.



Su interés se centró en la arqueología de Quintana Roo. Inicio con el salvamento arqueológico del Edificio de los Pájaros, en Xelhá, posteriormente con numerosos trabajos en los sitios de Punta Piedra, Calderitas, Xulhá, Cobá, Xelhá, Punta Nikú, Yamilu’um, Boca Iglesia y, especialmente, en los sitios de Tulum, El Rey y El Meco, a los que dedicó muchos años de estudio.



El 20 de febrero falleció el profesor-investigador César Huerta Ríos, uno de los antropólogos sociales más reconocidos en el medio académico y con más de 35 años de labor docente en la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH).



Pilar en la formación de antropólogos, Huerta Ríos nació el 25 de diciembre de 1926 en Chitré, Panamá. Sus estudios hasta el bachillerato los realizó en el Instituto Nacional de ese país, posteriormente, en 1954, se trasladó a la Ciudad de México con la finalidad de estudiar sociología, y en 1960 concluyó sus estudios de etnología y antropología social.


Entre 1969 y 1972 colaboró en el Proyecto Rescate Etnográfico, bajo la dirección de Fernando Cámara Barbachano, que le permitió tener contacto con la etnia triqui en Oaxaca. Producto de sus indagaciones, en1979 presentó su tesis de maestría en Ciencias Antropológicas en la ENAH, trabajo por el cual un año después (1980) recibió el Premio Nacional de Antropología Julio de la Fuente, del Instituto Nacional Indigenista.


Al siguiente año ingresó, previo examen de oposición, al INAH y su centro de trabajo fue, desde entonces, la ENAH, donde forjó numerosas generaciones de estudiantes.


Sensible también fue la muerte del destacado epigrafista inglés Ian James Alastair Graham, el 1 de agosto. Sus trabajos resultaron cruciales en el desciframiento de la escritura jeroglífica desarrollada por la antigua civilización maya.



Ian Graham fue director emérito y fundador del Corpus de Inscripciones Jeroglíficas Mayas (Corpus of Maya Hieroglyphic Inscriptions), del Museo Peabody de Arqueología y Etnología, de la Universidad de Harvard, Estados Unidos.



Como parte de tal proyecto, se encargó de registrar monumentos con escritura jeroglífica en los sitios mayas mexicanos de Yaxchilán, Chichén Itzá, Uxmal, Edzná, Xcalumkin y El Resbalón, además de los ubicados en Guatemala y Belice, como Aguateca, Altar de Sacrificios, El Mirador, La Corona, Dos Pilas, Naranjo, Nim Li Punit y Ucanal.



Su contribución científica le mereció diversos reconocimientos, como la Orden del Imperio Británico, cuya condecoración fue otorgada por la reina de Inglaterra, en 1999. Asimismo, en 2004 fue premiado por la Society of American Archaeologists; recibió la Orden del Quetzal de Guatemala, en 2007, y la Medalla INAH en 2008, entre otros galardones.



Ese mismo mes se suscitó el deceso del doctor Teófilo Reyes Courtier, profesor-investigador de la Dirección de Etnología y Antropología Social (DEAS), del INAH. Sus estudios estuvieron enfocados principalmente a la región mixteca y la vida contemporánea de los campesinos mexicanos del estado de Veracruz.



Otro catedrático vinculado al INAH por el aporte que hizo en el estudio histórico del país, fue el doctor por la UNAM, Álvaro Matute Aguirre, quien falleció el 12 de septiembre a los 74 años de edad.



Miembro de la Academia Mexicana de la Lengua, se especializó en cuatro áreas: la historia de la historiografía mexicana del siglo XX, las representaciones históricas en las artes, los Constituyentes de 1916-1917 y la cultura liberal en México y España entre 1860 y 1930.



Su última participación con el instituto fue mayo, cuando impartió la conferencia Los Perfiles y trayectorias del Congreso Constituyente, en el Museo Casa de Carranza, actividad académica promovida como parte de los festejos por el centenario de la promulgación de nuestra Carta Magna.



El 14 de diciembre, el INAH también lamentó la partida del arquitecto, restaurador y académico Javier Villalobos Jaramillo, prominente defensor de la historia y el patrimonio cultural de México, quien se desempeñó como presidente del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos) México, de 2003 a 2009.



Cursó sus estudios de arquitectura en el Instituto Politécnico Nacional (IPN) y, posteriormente, fue becado por el gobierno español y la Organización de Estados Americanos (OEA) para realizar un posgrado en restauración de monumentos y conjuntos monumentales en Madrid.



Continuó su formación al cursar una maestría en arquitectura en la Universidad Nacional Autónoma de México, institución en la que además fue profesor durante 17 años.



El arquitecto Javier Villalobos, quien también se desempeñó como subdelegado del Centro Histórico de la Ciudad de México y del Fideicomiso Centro Histórico, fue autor de significativos aportes bibliográficos como Los 100 sitios y monumentos más importantes del Centro Histórico.



Durante su amplia trayectoria profesional, se hizo acreedor a reconocimientos como el Premio Federico Sescosse, que obtuvo en 2012 por parte del Icomos México; galardón instituido en 2001, que retoma la figura del zacatecano Federico Sescosse Lejeune (1915-1999).

Mas Articulos