La arqueóloga Pilar Luna, coordinadora del Proyecto Hoyo Negro, hizo una retrospectiva sobre los orígenes, pormenores y resultados de esta iniciativa científica
Uno de los más recientes logros de la iniciativa, es el mapeo de 16,916.9 metros de la cueva sumergida, así como la reconstrucción virtual del contexto arqueológico
A doce años de la primera inmersión en sus aguas, la cueva inundada de Hoyo Negro, en Quintana Roo, célebre por haber resguardado durante milenios los restos óseos de “Naia”, el esqueleto humano más antiguo y completo recuperado en América, es todavía un sitio abundante en información para los especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y de diversas instituciones científicas que participan en su investigación.